Directo como lo es siempre, Vicente Fernández aprovechó una pequeña reunión que tuvo con medios mexicanos para dejar en claro que, cuando fallezca, no quiere que se le hagan homenajes de cuerpo presente, justo como ocurrió con sus colegas Juan Gabriel y Joan Sebastian.
“El día que yo falleciera me gustaría que fuera normal, nomás que no me trajeran como vendiendo charamuscas por todo el país, yo dentro de un cajón, eso no me gustaría. Ya me han propuesto en vida grabar mi vida, mi vida no es como para andarla pregonando, además mi vida la conocen todos ustedes. Me gustaría que fuera, el día que Dios que me recoja, un día normal”, aseguró durante una conferencia de prensa realizada en su rancho “Los Tres Potrillos”.
Ahí es en donde el cantante se ha refugiado desde su retiro ocurrido en abril pasado luego del concierto que ofreció en el Estadio Azteca y el cual se convirtió en un CD + DVD.
Este material ha logrado vender más de 90 mil copias en México, razón por la que se le otorgó Disco de Oro y Disco de Platino en esta reunión con la prensa en la que también recalcó que no volverá a cantar en vivo.
“Yo ya me despedí, aquí (en la conferencia) estamos de cuates, yo siento la muerte de Joan (Sebastian), de Juan (Gabriel), pero nadie somos eternos”, aseguró “El Charro de Huentitán”.
Aunque está feliz con el retiro, Chente reconoció que su salud no ha estado bien e incluso, agregó que cuando grabó el video del tema para apoyar a Hillary Clinton se sentía un poco mal, pero tomó fuerza para hacerlo.
“Era mi sueño retirarme así, entero, aunque parece que me afectó la despedida porque llevo tres años con que me enfermo, me vuelvo a aliviar, pero el caso es que mientras camine estoy vivo”.
