Si hace algunos años hubiéramos leído este encabezado, tal vez habríamos pensado que se trataba de una broma, sin embargo hoy en día aunque suena insólito, gracias a los adelantos de la ciencia y a que la legislación de algunos países lo permite, fue posible que un bebé naciera dos años después de la muerte de su madre.
Dinos: ¿Qué te parece la historia de Nisim Ajash y su bebita?
Nisim Ajash quiso cumplir los deseos de su esposa de traer al mundo a un hijo suyo y acudió a la organización New Family para que le ayudaran a convertirse en padre, pues finalmente “el 50 por ciento del material genético era suyo”, y aunque se enfrentó a una complicada batalla jurídica, la fiscalía general de Israel finalmente autorizó que se utilizaran dos de los embriones congelados en aquel entonces.
El proceso se llevó a cabo en Estados Unidos con el vientre de alquiler de una mujer de esa nacionalidad y una hermosa niña nació apenas el pasado jueves, con los genes de su madre biológica que no llegó a conocer.
Por su parte, Nisim Ajash tiene ya una nueva pareja, con quien piensa criar a su hija, a la que se llevará a vivir a Israel.
Es normal que en algunos países sea permitido que algunas madres de alquiler traigan al mundo a los hijos de mujeres que no pueden tenerlos, pero es la primera vez que se implantan embriones de una mujer fallecida en un vientre de alquiler